Aire Eslavo es el nombre de la segunda temporada de la Orquesta Sinfónica Juvenil que durante tres días transportará al público cruceño a la época del romanticismo, puesto que dará un homenaje a dos grandes compositores rusos Serguéi Serguéievich Prokófiev y Piotr Ilich Tchaikovski. El lugar elegido para el gran concierto es la Casa de la Cultura Raúl Otero Reiche, los días viernes, sábado y domingo.
Piezas que no pueden faltar. El director de la Orquesta Sinfónica Juvenil Santa Cruz, Boris Vásquez, señaló que las obras de los dos grandes compositores conforman la oferta programática musical. "Son consideradas una necesidad dentro del repertorio de formación para un músico de orquesta, el cual en el transcurso del tiempo, esperará impacientemente hasta que llegue la hora de tener la oportunidad y el honor de interpretarlas".
Repertorio que invita a sumergirse en la historia Vásquez argumentó que el concierto estará dividido en dos, la primera inicia con el homenaje a Serguéi Serguéievich Prokófiev con el cuento sinfónico Pedro y el Lobo Op. 67, el cual será relatado por Carlos Valverde; mientras, la segunda parte la orquesta interpretará dos grandes obras de Piotr Ilich Tchaikovski, como Cascanueces suite que cumple 120 años y por último la Marcha Eslova.
Las obras más destacadas. Las obras más destacadas de Piotr Ilich Tchaikovski son sin duda El lago de los cisnes (1877) y la última fase de su actividad creadora pertenecen la ópera La dama de picas (1890), los dos ballets La bella durmiente (1890) y Cascanueces (1892) y la última de sus seis sinfonías, verdadero testamento musical: la Sinfonía núm. 6 'Patética' y Serguéi Serguéievich Prokófiev se destacó por el cuento infantil Pedro y el lobo, los ballets Romeo y Julieta y La Cenicienta, las partituras para dos filmes de Eisenstein, Alexander Nevski e Iván el Terrible, las tres "sonatas de guerra" para piano, la Sinfonía núm. 5, la monumental ópera Guerra y paz.
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