Cuando el escritor beniano Homero Carvalho fue designado presidente de la Fundación Cultural del Banco Central de Bolivia (BCB), sostuvo que uno de los objetivos de su gestión era que la institución se hiciera cargo de la administración del Archivo de la Casa Suárez, espacio ubicado en Guayaramerín, que conserva documentación de gran valor sobre la historia de las culturas amazónicas bolivianas, especialmente de la época del auge de la goma.
Como parte de esos objetivos, ayer se dio un paso importante al consolidarse el traspaso de la administración del Archivo de la Casa Suárez a la fundación del BCB, tras llegarse a un acuerdo entre la institución cultural y la Universidad Autónoma de Beni, que estaba a cargo del espacio.
“Al no contar la universidad con las condiciones para manejar este archivo propusimos que sea la fundación la que se hiciera cargo. La propuesta obedece no solo al objetivo de desconcentrar los archivos, sino también de recuperar gran parte de la documentación que se encuentra deteriorada y que corre el riesgo de perderse para siempre”, señaló Carvalho.
El funcionario indicó que la propuesta cuenta con el aval del presidente del BCB, Marcelo Zabalaga. También aclaró que como parte de su política de desconcentración de las instituciones de la fundación, los documentos de la Casa Suárez no serán llevados al Archivo de Sucre, sino que se quedarán en Guayaramerín.
Sobre su cargo
Consultado sobre una información que llegó a este medio respecto a la posible destitución de su cargo en la presidencia de la fundación, Carvalho negó tal situación. “Son rumores que vienen de parte de un grupo que intenta desestabilizar a la fundación”, aseguró el escritor, que añadió que el directorio designará a un nuevo presidente una vez que se aprueben los nuevos estatutos de la institución.
El director del Banco Central de Bolivia, Abraham Pérez, ratificó las afirmaciones efectuadas por Carvalho
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