La importancia. “Ya son siete años que se fue Herminio. Sentimos que es nuestro deber presentarlo nuevamente al público, no por el miedo a que su trabajo y su figura se descoloren con el tiempo, sino para tener una visión más completa de su gran obra, enamorada de las mujeres voluptuosa y carretones monumentales de una Santa Cruz que se nos va”, señala Ejti Stih sobre una de las razones para realizar este homenaje. Por su parte, el maestro Juan Bustillos señala: “Es siempre importante mirar hacia atrás un poco para sustentar la misma obra, para ver en qué se afianza, cuáles son las raices del arte cruceño”, sobre la importancia de la obra de Pedraza y resalta “Los artistas que han trabajado antes de nosotros han tenido más dificultades, ya que en su época no había escuelas, galerías, curadores, y museólogos. Los artistas se hicieron a sí mismos por el puro esfuerzo y el creer que sí había que hacer arte”, indica Bustillos haciendo referencia a lo duro que era trabajar ante la indiferencia de la sociedad que en la actualidad es mucho más sensible al arte, aunque todavía no tanto como se necesita. "Hacer arte en ese momento era de valientes, tanto él como Armando Jordán han logrado hacer que la pintura cruceña tenga un nombre", finaliza Bustillos.
La obra de Pedraza. Parte de la escuela del maestro Jorge Rosza con Tito Kuramotto y Marcelo Callaú. Se lo conoce por ser precursor del arte moderno y la intensidad de sus emociones con el manejo de los colores y las texturas. Conocido, además, como el artista fauve del oriente boliviano y sus obras se compraron con varios grandes de la pintura mundial, considerado como maestro en términos de composición, muy a menudo recurre a interesantes efectos visuales, sobre todo en los últimos años de su producción pictórica.
“Él ha reflejado lo que es su entorno y como se dice “pinta tu aldea y serás universal”, indica Bustillos y continúa ”Él ha pintado lo que sentía y lo que veía en este lugar del territorio boliviano, su pintura es un reflejo de temas sociales y no solamente es una preocupación estética, sino también de fondo social que eran las luchas cívicas y luego retratar lo que era la vivencia casi rural de esta parte del país. Inspiración en casi toda su obra”.
La exposición. Se extenderá por las cinco salas de la galería en la Manzana 1. Las obras mostrarán un homenaje al pintor y no así una retrospectiva ya que es un conjunto no cronológico, gracias a la ayuda de los coleccionistas y familias que tenían los mismos. Además, se tratará de replicar los diferentes lugares donde estuvo Pedraza incluyendo su caballete y algunas otras herramientas. También habrá videos sobre entrevistas y análisis de su obra, además de fotografías de algunos de sus cuadros en colecciones fuera del país. En el espacio externo de la manzana se montarán gigantografías con sus cuadros, que se destacan por su tamaño ya que el pintor era prolífico y pintaba cuando podía y sobre la tela que encontraba como señalan los que lo conocieron.
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