“Todos los años voy al Elay Puej, me gusta ver a los jóvenes sentirse orgullosos de nuestra cultura, pero este me gustó más, el lugar es más cómodo y mucho más ordenado”, dijo
Arminda Romero, una espectadora. Como ella, unas 5.000 personas se dieron cita para presenciar la 24ª. versión del festival de danza y folclore más representativo del oriente boliviano. A las 19:20, las chacareras, chobenas, carnavales, taquiraris, los ritmos vallegrandinos y chaqueños se adueñaron del Cambódromo y se convirtieron en los protagonistas de la noche, gracias a 1.500 bailarines, que divididos en 15 elencos, dieron forma al festival.
Los primeros en mostrar sus coreografías fueron los elencos infantiles, en una categoría debutante denominada Velatacuses, en la que pequeños desde los cuatro años bailaron por la pista de 100 metros durante 10 minutos, demostrando en cada paso coordinado el porqué forman parte de este festival.
Luego continuaron los grupos juveniles, haciendo su entrada los ballet Amadeo Mozart, Kerembas, Luna Chaqueña y otras ocho agrupaciones.
La organización
63 gendarmes municipales, 35 guardias de seguridad privada, tres unidades de UMEA (Unidad Médica de Emergencia de la Alcaldía) resguardaron tanto a los bailarines como a todo aquel que se dio cita en el evento, que terminó a las 22:00.
“El festival fue todo un éxito, las graderías quedaron totalmente llenas, muchos se quedaron fuera, porque no quisimos cargar de peso la tribuna”, indicó Héctor Molina, el organizador del festival
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