El galpón ubicado en el barrio San Isidro del distrito 8, que hasta hace 18 días era utilizado como espacio para cursos, talleres y actividades culturales por el Centro Cultural San Isidro, está abandonado y los vecinos de la zona están preocupados por esta situación.
Lesly Rosales, que vive a una cuadra de este sitio, se comunicó con EL DEBER y manifestó su malestar por el descuido en el que ha caído el lugar, y pidió un arreglo entre las partes para que nuevamente pase a ser utilizado por el centro cultural.
En un recorrido por la zona este medio constató que efectivamente el galpón no funciona, es más, su interior luce totalmente vacío, sin ningún mueble. Otros vecinos también se acercaron para dar su visión respecto a este tema.
Inicio del problema
Todo empezó cuando el 11 de septiembre el nuevo presidente de la junta vecinal del barrio San Isidro, Diego Justiniano, solicitó la devolución del galpón, aduciendo que quería realizar nuevas tareas y trabajos en el edificio. Finalmente, el galpón fue desalojado por el Centro el 30 de ese mes.
Justiniano en su descargo dijo el martes que pidió el desalojo al no obtener una respuesta de parte de los directores del centro al pedido de ceder el espacio algunas horas a la semana para realizar sus propias actividades para los vecinos.
Mencionó que aún no ha iniciado las tareas que prometió porque aún no tiene el presupuesto para financiar las mismas ni para comprar muebles, ya que los que había pertenecen al Centro San Isidro.
Próxima reunión
El subalcalde del distrio 8, Jesús Álvarez, indicó que está esperando la llegada de Fernando Figueroa -gestor del Centro Cultural San Isidro- de La Paz para reunirse con él, con Diego Justiniano y con Alberto Montenegro, presidente de la junta vecinal de Villa Bolivia, copropietaria del galpón.
Álvarez dijo ayer que espera aclarar al centro cultural que puede seguir en el galpón, si comparte espacio y tiempo con actividades de la junta vecinal
Más datos
Nuevo lugar
Mientras tanto, los niños que cursaban los diferentes talleres en el galpón ahora lo hacen en un espacio improvisado en el Centro Cultural San Isidro.
Malvivientes
Los vecinos cercanos al galpón hicieron notar que incluso llegan hacia el lugar algunos cleferos producto del abandono en el que ha quedado.
Quitan apoyo a la cultura
Juan Pablo Sejas, director del Centro Cultural San Isidro, dijo que al dejar de funcionar el galpón se está matando un pedacito de cultura en Santa Cruz, ya que el lugar llegó a convertirse en un referente de este tipo de actividades.
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